segunda-feira, 18 de julho de 2011

CARTA A LA FAMILIA ARGENTINA





Esta es una carta de ficción, sin ninguna pretensión de reflejar la realidad de cualquier
persona, simplemente una percepción virtual de una observadora a millares de Km. de
distancia, obedeciendo el contacto superficial posible entre los límites actuales de la
tecnología.
Una vez, un pariente argentino (Pepe) me dijo que en un determinado momento de la vida las
personas despiertan interés por sus orígenes, por este motivo el hacia cuestión de hacer
algunos registros como fotos o actos para que sus descendientes tuvieran acceso en el futuro.
Sería como un “click “mental y emocional que de repente nos despertaría la curiosidad y
respeto por los que vinieron antes que nosotros.
Confieso que hasta hace muy poco tiempo, my interés se restringía a abuelos maternos y
paternos y sus descendientes directos, con el objetivo de honrarlos e aceptarlos en el lugar
que tienen en la familia.
Sabiendo que había familiares en Argentina tome contacto con un muchacho Argentino y me
di cuenta que allí hay más personas de la familia Uehara que en Japón o Brasil.
En el país vecino hay mucho movimiento, color y alegría .Hay hombres y niños con nombres
que comienzan con KIYO…, de la misma forma como les gustaba a nuestros ancestrales. Hay
personas que trabajan con flores, hacen Origami, estudian física, danzan Odori, comen locro y
chinchulín… Otras todavía están estudiando Ingeniería en Sistemas… y practican Arco y
flecha….
Encontré hermosos bebes de 5a generación, con sus chupetes que eran la alegra de los hogares
Cuadros de Fútbol multicoloridos , uno de ellos con el sugestivo nombre de Japoneses F.C., Taikos,
haciéndose eco en todas las direcciones.
Personas que gustan de Charly Garcia y otras que son “cosplayers; algunos gustan de Linkin
Park e muchos juegan Cityville
Personas que celebran y disfrutan de la compañía de las  tías Gemelas y ellas me parecen tan
familiares como si yo ya hubiera estado en sus casa, tomando café, comiendo torta y oyendo
sus sabios consejos
Yo no sabía que había, Adriana, Carina y Elena Argentinas, así como nosotros tenemos
Adriana, Karina y Helena Brasileras
Aprecio los nombres como Florencia, Federico, Nicolás y Juan, tan diferentes y con una sonoridad
bellísima con la cual mis oídos no están acostumbrados y que exigen de mi una “R” en lugar de “ J”.
En Buenos Aires hay mujeres elegantes , discretas de gustos selectos , amantes de la
naturaleza, viajes fotografía de las memorias ; son mujeres muy inteligentes y que no se
amedrentan frente a lo que consideran incorrecto o deshumano. Algunas salen en defensa de
los más débiles o oprimidos pero con delicadeza y sin violencia.
Admiro a una mujer que conto la historia de la inmigración Okinawana en Argentina, atraves
de un álbum de Familia. Con este trabajo pude viajar a lugares desconocidos y estar con
personas que nunca vi. Me enorgullecí de Tíos Abuelos sin nunca haberlos conocido o
escuchados sus historias.
Las mujeres de Buenos Aires hacen justicia a la descendencia. Honran a ese anciano exentico,
de aire intelectual que por lo visto era muy inteligente.
Veo personas que sienten añoranzas de sus antecesores así como nosotros tenemos de
nuestros seres queridos. También yo de repente tuve añoranzas de esas personas que nunca
conocí; imagino lo que fueron, lo que podríamos haber conversado se nos hubiéramos
encontrado personalmente.
Veo niñas que ganaron el mundo en un intercambio de culturas, colores , sonidos ; lindas
corajosas, niñas que hoy son ciudadanas del mundo en una tierna edad...Argentinas?
Mejicanas? Australianas? No sé decir… el mundo quedo pequeño. Nuestros abuelos y
bisabuelos demoraron 45 días para hacer el gran viaje de barco, y ahora cruzamos todos los
continentes en cuestión de horas
Hoy somos la personificación de un sueño Americano colectivo, sonado por un grupo de
hermanos a casi 100 años atrás. Hoy tenemos cada un nuestros propios sueños y sabemos que
tenemos algo en común. Respeto y admiro a aquellos que nos precedieron. Si fuéramos
personajes de García Márquez ( en mi imaginación todo es posible ) Creo que nuestro libro
tendría el titulo “Cien años de Realización”.

Traduzido por Elina Bruni, nascida em Buenos Aires e atualmente morando em Campinas/SP/Brasil